LA GACETILLA TAURINA 

 Nº  9 -  8 de Abril  2005    (Textos originales del Dr. en veterinaria D. Juan José Zaldivar)

 ALCALDESAS DE LA TAUROMAQUIA

             
           

           Una de las muchas virtudes de ese centenario y querido Diario ABC, que   venimos leyendo desde hace más de sesenta años y en el que me publicaron muchos trabajos sobre los toros de lidia a lo largo de dos decenios, es disfrutar de una encomiable visión vanguardista y    acertar el momento para ofrecernos lo que sucede de interesante en materia taurina, tanto en  España como fuera de ella. Contado desde siempre con la más destacados críticos y escritores en el tema, permite a la vez, como en esta y otras muchas ocasión anteriores, abrir la puerta de chiqueros a esta modesta pluma, que ha entregado su vida al estudio del toro bravo y, consecuentemente, a la más culta y hermosa de las fiestas, la de toros.

          Dos ilustres damas –en estos tiempos en que ellas están demostrando en todos los campos del saber, la ciencia y la política, que en nada se diferencian de los varones-, alcaldesas de lujo, una en mi Tacita de Plata, doña Teófila Martínez, y otra, doña Pilar Barreiro, en la capital de las cinco colinas mágicas, cuya riqueza arqueológica se escapa a la imaginación: la hermosa Cartagena. Ambas –nos congratula saber que entre ellas existe una leal amistad-, están plenamente conscientes del  momento crucial que vive la Fiesta de Toros en sus respectivos municipios capitalinos y de las repercusiones socioeconómicas, culturales y políticas que conllevan dar a luz -¡ellas son las únicas dotadas por la Madre Naturaleza para darla!...-, en unos años en que muchos hombres están cubriendo el mundo de sombras, y muy pocos de grandezas, como Juan Pablo II-, el hacer realidad el ansiado sueño de los aficionados  de Cádiz y Cartagena de tener pronto sus respectivas plazas de toros… y  de que el proyecto de una sirva para ambas, quedando así  hermanadas antes de nacer. Sería algo tan insólito como histórico en el que dos comunidades fenicias de hace más 3.000 años se unan fraternalmente en la Fiesta de Toros.

            No pueden comprender los aficionados de ambas ciudades, en las que existieron sendas plazas de toros y la afición más entendida del país, no cuente  cada una con un hermoso coso. Calculamos que tanto en Cádiz como el Cartagena hay más de 50.000 aficionados de hueso colorado. A muchos nos impresiona doña Teófila Martínez oponiéndose valientemente, con su firme convencimiento e impulsada por su amor a  Cádiz y a sus paisanos, al presidente de la Junta de Andalucía, dejándolo muchas veces pegado a las tablas. Le sobra casta para lograr darle a los suyos una plaza de toros. Tanto más méritos tiene aún doña Pilar Barreiros, porque sin ser aficionada, ha tenido la rica sensibilidad humana y la visión social, cultural y política, para  comprender que la afición de Cartagena sigue palpitando en miles de cartageneros y resurgirá incontenible con la nueva plaza de toros…”porque es un proyecto sin marcha atrás.” Hermanar en su día ambos cosos puede constituir un hito histórico de incalculables dimensiones.

            Cartagena tiene, además, el privilegio de contar con un “Foro Taurino Cultural…”, cuyos miembros son fiel reflejo de una ciudad culta y de una solera taurina envidiable, como ocurre en Cádiz. Dicho  Foro, junto con peñas y tertulias taurinas, organizaron el extraordinario II Congreso Taurino de la Región de Murcia. Así, aficionados gaditanos y cartageneros, se sumarán en su día, como viene ocurriendo en estas fechas en la mágica Maestranza sevillana, en días de feria llenos de luz y  tardes iluminadas con el arte de Cúchares, para contrarrestar el daño que se le quiere hacer al acto cultural, litúrgico, espiritual y artístico más deslumbrante creado por los hombres a lo largo de la historia. Las palmas “echaran humo” a no mucho tiempo, para Pilar y Teófila, las dos primeras “alcaldesas de toros bravos” de la tauromaquia.

                 

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casemo - 2004