Autlán,(Méx) 28 Feb.  Plaza "Alberto Balderas". Primer festejo de feria. Un tercio de entrada en tarde cálida, con algunas ráfagas de viento. Un novillo de Celia Barbabosa para rejones, noble y con clase, y cuatro deLos García, bien presentados, serios, y de juego complicado en general, de los que destacó el 5o. que fue premiado con arrastre lento




El rejoneador Alejandro Zendejas: Ovación.
Fernando Gómez Vega (burdeos y oro): Silencio y oreja.
Juan Pablo Llaguno (verde manzana y oro): Oreja y vuelta.

Incidencias: Los Forcados Amadores de Évora realizaron una buena pega al primer intento y fueron ovacionados conjuntamente con el caballista. Destacó en varas Juan Miranda.

Si algo tuvo la novillada de Carnaval en Autlán fue emoción porque se lidió un encierro con mucha romana, serio por delante y dos toreros, cada uno a su edad taurina, que asumieron la oportunidad con responsabilidad y mucha entrega.

En este sentido, menuda prueba superó el novillero tapatío Fernando Gómez Vega -quien por cierto fungió como primer espada, no obstante que debutó en público con posterioridad a Llaguno– si tomamos en cuenta su corta edad taurina; porque, más que novillos –al igual que a su compañero de cartel– le tocó lidiar un par de toros... ¡vaya arboladura y cuajo!

Con el primero destacamos un quite por tafalleras y bien cubierto el segundo tercio. Nota: los tres pares por el pitón derecho. El segundo en su papelillo, un –uff- precioso tío, cárdeno y pavoroso por delante–, no amilanó al de Guadalajara. Sobresaliente con la espada, Gómez Vega deletreó una estocada en todo lo alto hasta los gavilanes. Con tantita suerte podría convertirse en la estocada de la feria.

Por su parte, Juan Pablo Llaguno avanza a paso firme. Está en el camino ser un torero serio y muy clásico. Delante de su primero, un novillo gazapón y limitado de fijeza, le paró con valor y lo llevó muy sometido para extraerle series con mando y mucho mérito. Mató de estocada entera, y defectuosa, que bastó, para llevarse en la espuerta un bien merecido apéndice.


Con el más pesado del encierro –un ejemplar de 440 kilos– el queretano mostró tal disposición con un toro que fue a los engaños con la cara por los cielos, por lo que resultó benévola la concesión del arrastre lento a sus despojos. Con este ejemplar, el piquero Juan Miranda se llevó una gran ovación. A lo largo de su faena, Llaguno se prodigó en un ceñidísimo quite por gaoneras y en el prólogo a su faena de un torerísimo toreo por bajo.

Abrió plaza el rejoneador Alejandro Zendejas desarrolló una monta muy aseada y sin que hablemos de un triunfo resonante gustó al público autlense. Los pasajes más destacados los tuvo al colocar garapullos con mucha exposición. Uno de ellos de manera muy espectacular, cuando llevó a su enemigo, muy cerrado en tablas, para clavar banderilla en el centro del ruedo y por todo lo alto.
Al final de su intervención, el queretano dejó bien colocado el rejón de muerte al primer intento y, como tardara el morito en doblar, echó pie a tierra para descabellarlo. Cabe destacar la buena pega, al primer intento, de los Forcados Amadores de Evora, Portugal, que les valió para saludar una ovación en el tercio acompañando al caballista.

El público despidió de pie a los novilleros, que agradecieron las palmas. Para mañana sábado, un toro de San José para el rejoneador Emiliano Gamero, y seis de El Vergel para Joselito Adame, Octavio García "El Payo" y Diego Silveti. Se prevé un lleno en los tendidos del coso.

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