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Juan José Padilla
Padilla abre por primera vez la Puerta Grande de la Feria de Málaga
21 Agosto 2013Málaga. Se lidiaron dos toros de Jandilla (1º y 4º), dos de Domingo Hernández (2º y 5º) y dos de Zalduendo (3º y 6º), desiguales de presentación y juego. El 4º fue encastado, 2º y 5º manejables. La plaza registró, en la cuarta de abono, tres cuartos de entrada en tarde agradable.
Juan José Padilla: estocada (palmas) y estocada (dos orejas).
Julián López 'El Juli': estocada (oreja) y pinchazo, estocada y descabello (oreja).
Alejandro Talavante: estocada que hace guardia y estocada (palmas) y pinchazo y estocada (ovación).
La afición malagueña ha disfrutado hoy de una gran tarde de toros en la que se ha proclamado triunfador absoluto el diestro gaditano Juan José Padilla, que ha sido el primer espada en abrir la puerta grande en esta Feria de Málaga 2013. Fue tras cortarle las dos orejas al cuarto de la tarde, un toro de Jandilla con un pitón derecho excepcional y con el que lució variado con el capote y banderillas. Ya con la muleta, el astado derrochó emoción, y fue aprovechado por un Padilla animoso y bullidor. Inició su labor con muletazos de rodillas, y la finalizó con molinetes, también rodillas en tierra. La afición se entregó al Ciclón de Jerez, solicitando con fuerza las dos orejas tras una buena estocada.
En el que abría plaza no pudo alcanzar cotas tan altas, sobre todo porque el animal fue muy rajado y tuvo muy poco recorrido. Pese a que lo intentó con insistencia, no llegó el lucimiento deseado en el transcurso de su labor.
También triunfó en el conjunto de la tarde El Juli, que no salió a hombros ya que las dos orejas que paseó fueron de dos toros diferentes. Sus dos faenas tuvieron como punto en común la labor realizada por el diestro para sacar partido a dos astados que, a priori, no ofrecían demasiadas esperanzas. No obstante, supo corregir el cabeceo inicial de su primero, estando muy por encima de un animal que siempre fue con la cara alta pero terminó entregado.
El quinto, por su parte, fue un toro parado de inicio ante el que realizó una faena de gran entrega y emoción. El Juli se dio un arrimón con gran sinceridad que enloqueció a los tendidos. Con la puerta grande al alcance de su mano, esta vez no entró la espada a la primera y eso le privó de salir a hombros junto a Padilla.
Completaba el cartel Alejandro Talavante, que no tuvo suerte con el primero de su lote, del hierro de Zalduendo, y que pecó de poco recorrido. No obstante, ofreció tandas con gran empaque y elegancia hasta que el burel se rajó a tablas. Más consistencia tuvo su faena al sexto, llena de temple y con tandas de naturales de enorme calidad. Supo darle sus tiempos para cuajar una labor finalizada con manoletinas. De haber estado certero con los aceros podría haber paseado también un trofeo, que incluso fue solicitado por una minoría del público.EFE